PLAZA DEL CASTILLO

La plaza del castillo o  El cuarto de estar de los Pamploneses, pero... ¿dónde está el castillo?

El castillo existió, pero hace más de cuatro siglos que desapareció, aunque la plaza lleve su nombre.
El rey Luis Huitín mandó construirlo en 1310, con piedra procedente de la destrucción de Navarrería. Cuando se derribó el castillo, la zona se habilitó como plaza, acogiendo justas de caballeros y corridas de toros, como ya os había contado.

La plaza estaba presidida por la fuente Mari Blanca, que fue sustituida por un kiosko de madera  en 1910, y en 1943 por el kiosko actual.

Tiene forma cuadrangular, y está rodeada por originales edificios de viviendas, en los que la mayoría son casas de lo más variopintas,  estrechas y alargadas del siglo XVIII.

En el lado Sur de la plaza estaba el Teatro principal, donde ahora no existe edificio alguno y es la unión con la avenida Carlos III.
En 1903 cambió su nombre por el actual Teatro Gayarre, y posteriormente se trasladó a la ubicación actual.
También está la fachada del Diputación, en la que se pueden apreciar las consecuencias de bombardeo de 1937, en la piedra de la fachada.

La mayor parte de la fachada Norte la ocupa el Café Iruña, un edificio fundado en 1888 por un grupo de pamploneses. Fue el primer establecimiento público en tener luz eléctrica en Pamplona. Como curiosidad, las columnas que sustentan el porche que lo resguarda, todas son de sección cuadrada, salvo una, que es circular y con capitel.

El Hotel la Perla, situado en una esquina de esta misma fachada, pelea con el Café Iruña por su protagonismo. 
Ilustres personajes que allí se han hospedado han contribuido a hacer de este hotel un emblema de la ciudad: Pablo Sarasate, Charles Chaplin, Heminwey, Manolete, Imperio Argentina...

La Plaza del Castillo es punto de encuentro, zona de paso y lugar de recreo para la mayoría de pamploneses y visitantes.

¿Nos tomamos un helado viendo pasar la tarde, en un banco de la plaza del Castillo?

¡NOS VAMOS DE SIDRERIA!

¿Quién dice que no a un buen chuletón, jugoso por dentro, que al masticarlo se deshace en la boca, recién sacado de las brasas? 
Yo desde luego que no me resisto!!!

Ahora va a terminar la temporada de Sidrería y hasta el año que viene, allá por Enero, no podremos volver a catar este delicioso menú que nos preparan en cualquiera de las sidrerías repartidas por Navarra y País Vasco.

El Ir de sidrería, es una expresión que se está poniendo de moda cada vez más, que es la excusa perfecta para comer bien, beber bien y terminar con una buena juerga hasta que el cuerpo aguante.

Las sidrerías suelen estar en pueblos algo alejados, o en plena naturaleza en el monte, (aunque también las hay en ciudad) por lo que cuadrillas o grupos de amigos contratan un autobús que les lleve y les traiga (no estamos para coger coche al salir de la sidrería),  reservan sitio en la sidrería.... ¡Y a disfrutar!!

Panorámica de una sidrería en Navarra

El menú de sidrería, para quien ande despistado, consiste en una serie de platos que sirven a toda la mesa, aunque en algunos sitios varía algún entrante. 
El menú típico consta de:

• Tortilla de bacalao

• Bacalao frito con pimientos verdes.

• Chuletón a la brasa, como plato estrella.

• Queso, nueces y dulce de membrillo.

Bacalao con Pimiento verde

Chuletón a la brasa

Todo esto acompañado de deliciosa sidra o sagardoa en euskera  (zumo de manzana),  que tienen en unas cupelas normalmente en el mismo comedor, y  los comensales entre plato y plato, o cuando más les apetezca, se levantan, abren el grifo y llenan sus vasos. A este gesto se le llama Txotx!  

Suele haber unos cubos justo donde cae el chorro de la sidra, para que no se manche demasiado el suelo o tirar el sobrante antes de llenar el vaso de nuevo.
Para el que no quiera hacer el ritual cada vez que quiera beber un poco de sidra, también te ofrecen jarras, que las llenas y las dejas en tu mesa, pero pierde la gracia ya que mientras el Txotx! se conversa con el resto de gente, se degusta la sidra de diferentes cupelas, incluso algún espontáneo animado se arranca con  algún bertxo.... vamos que es un acto social lo de ir a por sidra a la cupela.
¿Habéis comido en sidrería este año? ¿ Dónde habéis estado?

LESAKA

Lesaka es un pueblo de unos 2.700 habitantes,  que forma parte de Cinco Villas, la zona de Navarra más próxima al mar.

Plaza Zaharra

Es un valle rodeado de montes de un verde infinito, mezclados con el goteo ordenado de caseríos desperdigados. Es curioso porque además del núcleo urbano, precioso por cierto, los caseríos que se divisan en la lejanía y perfectamente podrían estar en tierra de nadie, son barrios que pertenecen al pueblo.

Las casas presentan la típica arquitectura de la zona, con entramados de madera de distintos colores sobre fachada de piedra o mortero pintado, que le dan tanto colorido al pueblo. 
Pasear por Lesaka es abstraerse del mundo, relajarse y disfrutar de sus preciosas calles, en las que si una casa te parece bonita, la siguiente lo es aún más.

Llama la atención la cantidad de pequeños comercios que tiene, decorados con mucho encanto y respetando la armonía del pueblo. Y qué decir de sus bares y restaurantes...¡Para chuparse los dedos cualquiera de ellos! 
El Restaurante Kasino ofrece la tortilla de patatas más laureada en muchos kilómetros a la redonda.

Restaurante Kasino

Río Onin

Lesaka posee casas palacio bien conservadas, y el Ayuntamiento o la iglesia de San Marín de Tours son ejemplos de arquitectura digna de visitar.

Plaza Zaharra y al fondo el Ayuntamiento

 La torre Zabaleta del S. XV destaca por su altivez frente al resto de casas que la rodean. Fue cuartel general de las tropas de Wellington en la guerra de la Independencia.

Torre Zabaleta junto al puente de piedra

Lesaka celebra sus fiestas el 7 de Julio (San Fermín), y diréis: bah, siendo a la vez que en Pamplona no saldrá ni el tato... ¡Al contrario! Tiene un ambientazo en San Fermín, que parece increíble que a unos pocos kilómetros se celebren  una de las fiestas más importantes del mundo, en el mismo momento y en la misma comunidad autónoma.

Es muy conocida en San Fermín, la tradición en la que los dantzaris bailan a ambos lados del  río Onin, se llama Zubigainekoa.
La historia de este acto se remonta al S.XV, cuando los barrios de Legarrea y Pikuzelaia, eternos enemigos separados por el río Onin, firman la paz y lo conmemoran mediante este baile que ha perdurado a lo largo de los siglos.

miathletic.com

Pero solo verlos bailando en ese murete de piedra, a sabiendas que más de uno se le habrá hecho tarde para llegar a casa, da para pensar: ¡Ay como se caiga alguno al río! Pero que yo tenga constancia, ninguno ha caído nunca, y eso se deberá a muchas horas de ensayo, sumadas a la gracia que tenga cada uno para mantener el equilibrio....¡¡Si es que bailan con la naturalidad de quien lo hace sin riesgo de caerse!! 



¿Sabíais que, según cuenta la leyenda, Olentzero baja de los montes de Lesaka para traer los regalos a los niños por Navidad? 
¿Os habéis fijado la cantidad de fuentes que hay en Lesaka?

PASEO POR EL RIO AL REVES

Un paseo muy agradable por la parte sur de Pamplona es el que une las tres universidades de la ciudad, UNED, Universidad Pública y Universidad de Navarra. 
Se puede ver, además de estudiantes, mucha gente paseado, practicando running, familias con niños...

Es un paseo bastante concurrido, sobre todo cuando empiezan a aparecer tímidamente los primero rayos de sol primaveral. Nos emocionamos tanto que salimos todos a la calle...por si acaso no dura!! que por otro lado, tampoco es de extrañar.

 El río Sadar, o río al revés,  es el nexo de unión de las tres, y permite un paseo paralelo a la orilla de este estrecho y normalmente poco acaudalado río.

Este río nace en  las sierras de Aranguren y Tajonar y aparece en Pamplona sigilosamente por el campus de la Universidad Pública, pasando también por el Estadio de fútbol Sadar (llamado así en honor al río) hasta desembocar en el río Elorz, en Echavacoiz.
De sus 19 km de recorrido, 3.7km pasan por Pamplona, y ya es curioso que pase por las tres universidades de la ciudad, y además lo haga de Este a Oeste, "al revés" que el resto de ríos de Navarra que desembocan en el Mediterráneo.

Es un río que pasa desapercibido por la mayoría de la gente, ya que en su trayecto varias veces queda oculto por la carretera,  antes pasaba por debajo del antiguo "Pamplonica" y en la Escuela de Arquitectura queda oculto unos 180 m, para luego volver a aparecer.

Hace poco se ha adecuado la zona donde estaba la fábrica de embutidos "Pamplonica", transformando la zona en unos preciosos jardines, y se le ha dado a este río la importancia que se merece, peleando en protagonismo con el geiser sobre el lago que también se ha instalado en la zona.

"El río al revés" pasa por debajo del puente Acella Landa, paso obligado para los peregrinos del Camino de Santiago.

Marca para seguir el Camino a Santiago

Puente Acella Landa

¿Os apetece un paseo junto al río al revés?

ARTAJONA MEDIEVAL

 No hay en España un lugar como este para reflejar el ambiente de la Edad Media

Y esto no lo digo yo, lo dijo Francisco Prosper, decorador de la película Robin y Marian, protagonizada por Sean Connery y Audrey Hepburn en 1977, que por aquél entonces ya eran actores de renombre.

Y es que Artajona por unos días pudo disfrutar de los entresijos de un rodaje con estrellas de Hollywood, incluso los propios artajoneses hicieron de extras para la película. Detalle que muchos de ellos todavía recuerdan con orgullo.

Viviendas dentro del recinto amurallado

Y no es de extrañar que eligieran Artajona para un decorado medieval, ya que El Cerco es la fortaleza medieval mejor conservada de Navarra.

La iglesia fortaleza de San Saturnino, vista desde el pueblo.

En 1084 comienza la historia de este recinto amurallado y su iglesia, gracias a los canónigos de Tolouse, que recibieron de manos del obispo Pedro de Roda los derechos de iglesia sobre Artajona.
La iglesia de San Saturnino ( S.XIII) se utilizaba de vigía y refugio y alertaba del peligro con las campanas.

Nueve torres almenadas abrazan dicha iglesia,aunque inicialmente hubo hasta ocho más, formando un perfil arriñonado.
El portal de Remagua abre sus puertas al pueblo que se fue formando en la ladera sur, mientras el portal de San Miguel da la bienvenida al cierzo que tantas veces merodea por la zona.

Curiosidades no le faltan a este pueblo, pues lleva con orgullo ser el único lugar en el mundo que las campanas se bandean al revés.

Y si os parece que ya no se puede pedir más para un pueblo tan pequeño, os contaré que fue Reino, durante pocos años y como regalo de bodas, pero lo fue al fin y al cabo. 
Fueron ocho años en los que la Reina Urraca junto a su marido el rey García Ramírez y después con su hermanastro Sancho III de Castilla gobernaron Artajona, Larraga, Miranda de Arga, Cebror y Olite.

El pueblo presidido por El Cerco se divisa desde la lejanía

Entrada al recinto amurallado por el Norte

¿Sabíais que también conserva sepulcros megalíticos de cinco mil años de antigüedad? Otro día os lo cuento.

EL ENCIERRO

Si por algo se le conoce mundialmente a Pamplona es por el encierro de San Fermín.
8 días al año, a las 8.00 de la mañana, 848m de intensa carrera que comienza rogando a San Fermín que nos proteja o como decimos aquí: nos eche un capotico.

Y capotes hacen falta, y muchos, ya que hay mucho descerebrado que se mete en el recorrido pensando que los toros no tienen cuernos, o que si se le acerca mucho uno, se le da al Pause y santas pascuas... ¡Que son morlacos de 600kg! Que si te pisa uno te acuerdas de sus pezuñitas por lo menos para el resto de los sanfermines, y no te quiero ni contar si te pilla el asta... ¡como un queso gruyere se han quedao algunos!

Pero la mayoría se toma el Encierro como lo que es (y menos mal), una carrera peligrosa, apta para valientes corredores que dispongan de buenas piernas, pero sobre todo, mucha cabeza.
Los habituales del encierro, cada uno tiene su sitio preferido para comenzar la carrera, así como sus propias manías o supersticiones. Todo es poco para el reto al que se enfrentan.

Los primeros datos que se tienen son de 1385, y la costumbre era trasladar los animales de las dehesas donde descansaban hasta la plaza. 

Como curiosidad, el encierro no siempre ha tenido el recorrido actual, pasando por Estafeta. Desde 1385 hasta 1844 las corridas de toros se festejaban en la Plaza del Castillo, por lo que el encierro transcurría por la calle Chapitela hasta llegar a dicha plaza.
 

Monumento al Encierro en Avda Roncesvalles

La plaza que actualmente está en uso, fue inaugurada en los Sanfermines de 1922, y tardó menos de un año en construirse, probablemente para evitar represalias por no estar lista para los siguientes sanfermines.

¿Habéis visto alguna vez el encierro in situ? ¿Conocéis a alguien que haya corrido el encierro?